Jirall compartió un comunicado en sus redes sociales comentando cómo vivió este split con Isurus y que podría ser de él a futuro.
Daniel “Jirall” del Castillo anunció a través de sus redes sociales su retiro del competitivo, luego de una temporada jugando para Isurus en la LLA, instancia en la que alcanzó la final en el apertura y las semifinales en el clausura. El mexicano ya había pausado su carrera en 2019, siendo parte del mesón de análisis de la competencia.
“Viví la liga muy de cerca, asistí a las finales y conviví con ex-compañeros y viejos rivales constantemente. Solo era cuestión de tiempo para que revivieran mis ganas de competir, ya que sentía que era un capítulo inconcluso en mi carrera de League. Quería averiguar qué tan lejos podía llegar de nuevo y se me presentó la enorme oportunidad de unirme a Isurus“.
El jugador comentó que lo más natural para él era unirse a un equipo con amigos y personas cercanas, por eso terminó escogiendo al tiburón a pesar de que habló con otros equipos también.
“Tuve un comienzo lento en el split, y empezar a mejorarlo fue cuestión de ir recobrando gradualmente el estilo de vida de una GH y practicar muchas horas seguidas. Era algo que los primeros dos meses me costaba y me drenaba bastante, pero con un poco de tiempo me adapté de nuevo y llegué a tener más ‘stamina’ para jugar más partidas en las noches y rendir un poco mejor a lo largo del día.
Cuando llegaron los playoffs del apertura tenía mucha más confianza en mí mismo y en el equipo, y siento que fue cuando pude desenvolverme mejor en el juego y hacer una mayor diferencia, lo cual se notó en cuartos y semis vs INF y R7. El día de la final contra AK fue el día que tuve menos nervios pre-juego en todo el split y que sentía mayor tranquilidad frente a lo que tenía que hacer dentro y fuera del game. Tras una serie bastante pareja, nos tocó perder en game 5″.
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Hate de la comunidad y falta de hambre
Jirall comentó que, a pesar de que nunca recibió mucho “hate” a lo largo de su carrera, sí fue más evidente en esta última etapa en la LLA.
“Diría que no me afectó, más allá de cierto momento en específico de estrés en el split. Pero como mi enfoque estaba primordialmente en funcionar bien con mi equipo y todo lo demás pasaba a segundo plano, pude ignorarlo… Creo que pude lidiar bien con todo esto gracias a tener las personas correctas cerca mío, entre familiares, amistades y también profesionales que me ayudaron”.
Para Jirall, el segundo split fue “como un viaje salvaje con muchos altibajos, algunas buenas victorias y momentos de satisfacción versus las peores derrotas y momentos de crisis colectiva”.
“Tradeamos juegos contra los otros top teams, pero droppeamos algunos contra rivales más débiles como XTN o FG ya que éramos bastante irregulares con nuestro desempeño. Fuese que drafteáramos mal, trollearamos el early, o no cerráramos el juego lo suficientemente rápido. Dentro de todo, pudimos aprender de estas derrotas y logramos mejorar un poco para el pentágono, donde quedamos 3-1 y fue nuestro ‘mejor punto’ en todo el torneo”.
Sin embargo, el jugador reconoció que al equipo (refiriéndose a los jugadores) “le faltaba cierta motivación y hambre”, apuntando que era un problema que les afectó a todos a partir de la segunda mitad del split.
“El equipo era bueno, sí, pero el elefante en la habitación permanecía: el hecho de que podría ser mucho mejor si más esfuerzo estuviese ahí. Siento que por esto llegamos hasta donde merecíamos llegar y punto”.
El retiro y el futuro de Jirall
Todo este viaje le hizo caer en la cuenta de que esta etapa ya debía terminar. “Encontraba mucha satisfacción en cada victoria, pero también mucho sufrimiento en cada derrota”, comentó, dejando en claro que si bien, su determinación para ganar e intentar dar lo mejor mejor de él seguía ahí, “me di cuenta de que ya no era un sentimiento que deseara seguir experimentando, y creo que, en un punto, es mejor poder saber decir ‘hasta aquí'”.
“No tengo definido exactamente que es lo que sigue para mí. Supongo que haré algo más ‘normal’, como empezar una carerra ya que nunca terminé mis estudios universitarios. Me encantaría seguir conectado con la escena de una u otra forma, pues ha sido un aspecto importante de mi vida desde hace muchos años. Seguro que también estaré streameando por Twitch, algo que siempre he disfrutado y me permite seguir compartiendo momentos con ustedes”.
Finalmente, el jugador entregó unas últimas palabras respecto a su última aventura profesional
“No estoy ni nunca estaré 100% satisfecho con mi nivel, y si bien era obvio que ya no iba a jugar precisamente en mi ‘prime’, eso no me detuvo a esforzarme al máximo y tratar de dar lo mejor de mí. Me gustaría haber podido ganar una copa más pero no se me llegó a dar. No me arrepiento de nada y el valor del trayecto recorrido es irremplazable. Para mi, el 2020 se trataba de intentarlo una vez más, y eso fue exactamente lo que hice”.
